El coronel Harland David Sanders fue el fundador de Kentucky Fried Chicken (KFC), una de las figuras más emblemáticas del emprendimiento estadounidense, famoso no solo por su receta secreta de pollo frito, sino por haber alcanzado el éxito a una edad en la que muchos ya se han retirado.
Harland Sanders nació el 9 de septiembre de 1890 en Henryville, Indiana, Estados Unidos y su vida estuvo marcada por la adversidad desde muy joven, porque perdió a su padre a los 6 años y comenzó a trabajar desde pequeño para ayudar a su familia.
A lo largo de su vida, tuvo una gran variedad de oficios y trabajos, ya que fue granjero, conductor de tranvía, bombero, vendedor de seguros, e incluso estudió derecho por correspondencia, aunque nunca lo ejerció.
Durante la Gran Depresión, comenzó a cocinar para los viajeros en una estación de gasolina en Corbin, Kentucky y allí perfeccionó su famosa receta de pollo frito con 11 hierbas y especias, preparada en una freidora a presión, lo que hacía que el pollo quedara crujiente por fuera y jugoso por dentro, en menos tiempo que con los métodos tradicionales.
Su sazón ganó fama, y el gobernador de Kentucky lo nombró «coronel de Kentucky», un título honorífico, en 1935, en reconocimiento a su aporte a la cocina local.
En los años 50, con más de 60 años, y después de que una nueva autopista desviara el tráfico de su restaurante, se vio obligado a cerrarlo y sin rendirse, tomó su receta, su sartén y su visión, y salió a recorrer Estados Unidos ofreciendo su pollo a restaurantes. Fue rechazado más de mil veces, pero finalmente, uno aceptó… y así comenzó la expansión de KFC.
En 1964, con más de 600 franquicias operando, vendió la compañía por 2 millones de dólares, una cifra enorme en la época, aunque siguió siendo su imagen oficial y embajador de marca hasta su muerte.
Hoy, KFC tiene presencia en más de 150 países y es uno de los gigantes mundiales de la comida rápida. El coronel Sanders es recordado no solo como un ícono del pollo frito, sino como un símbolo de perseverancia, visión y éxito tardío.
Murió el 16 de diciembre de 1980, pero su historia sigue inspirando a millones y en los numerosos reportajes y declaraciones entregadas a la prensa mundial, decía:
“Tenía 65 años, 105 dólares en el bolsillo y una receta de pollo… y nadie creía en mí. Pero, sorprendentemente, eso fue más que suficiente.
Mi vida no fue una línea recta hacia el éxito; fue una montaña rusa de fracasos, tropiezos y puertas cerradas. Perdí empleos, naufragué en negocios, fui rechazado por el ejército y ni siquiera terminé la escuela. A los 65 años, mi realidad era una pensión modesta del gobierno y una sociedad que me veía como alguien que ya no tenía nada que ofrecer.
Pero entre las cenizas de la derrota, conservaba algo valioso: una receta de pollo frito, perfeccionada con esmero en una vieja estación de gasolina. No era solo una mezcla de especias; era el símbolo de mi esperanza, de mi perseverancia, de mi fe inquebrantable en que aún era posible construir algo grande. Así que, sin garantías y con el alma por equipaje, metí mi sartén en el carro… y salí a tocar puertas.
Más de mil veces escuché un “no”, dormí en el auto, pasé hambre, sentí el frío del desprecio y la soledad; pero cada negativa alimentaba mi determinación. Con cada rechazo, repetía en silencio: “El siguiente dirá que sí”. Y un día, ocurrió. Una pequeña cadena de restaurantes aceptó probar mi receta… y con ese gesto humilde comenzó una revolución culinaria. Hoy, KFC está presente en más de 150 países. Mi rostro, ese que antes nadie miraba dos veces, aparece en millones de cajas alrededor del mundo.
No fui el más joven, ni el más brillante. Pero fui el que persistió cuando todos se detenían. Fui el que siguió caminando cuando el camino se volvió cuesta arriba. Si tú hoy estás en el suelo, no lo tomes como una sentencia, sino como un punto de partida. Tal vez ahí, justo ahí, comience el verdadero viaje de tu vida.
La edad no define tu valor. El fracaso no marca tu final. Lo único que importa es que no te detengas cuando tu corazón te susurra: sigue.”
La Palestra trae en entregas como esta, la vida de grandes personajes que no solo dejan huella, sino que son la inspiración para aquellos que persisten en hacer realidad sus sueños.
