La miel es un alimento natural dulce, producido por las abejas a partir del néctar de las flores o de secreciones de algunas partes de las plantas y su importancia radica en varios aspectos, veamos:
La miel es una fuente natural de carbohidratos, principalmente glucosa y fructosa, que proporcionan energía rápida, también contiene pequeñas cantidades de vitaminas, minerales, antioxidantes y enzimas.
La miel ha sido utilizada durante siglos con fines medicinales debido a sus propiedades antibacterianas y antisépticas y se ha utilizado para tratar heridas, quemaduras y dolencias respiratorias, entre otros.
Las abejas desempeñan un papel crucial en la polinización de plantas, incluyendo muchas de las que son importantes para la agricultura y la producción de alimentos.
Fotografía Archivo particular.
La miel ha sido valorada por diversas culturas en todo el mundo como un alimento especial, utilizado en la cocina para endulzar y dar sabor a una amplia variedad de platos y bebidas.
El origen de la miel se remonta a miles de años atrás, con evidencias de su consumo desde la prehistoria; se cree que las abejas han estado produciendo miel durante millones de años, mucho antes de la aparición de los seres humanos.
Por su parte, la historia de las abejas para la producción de miel se remonta a la antigüedad, con evidencias de colmenas artificiales encontradas en sitios arqueológicos que datan de varios milenios atrás.
Fotografia Archivo particular.
Para entender un poco el proceso que se sigue, cabe anotar que las abejas obreras recolectan néctar de las flores utilizando su lengua en forma de tubo, llamada «probóscide» y frecuentan una gran cantidad de flores en busca de néctar, que es una solución azucarada producida por las plantas.
Una vez que las abejas han recolectado el néctar, lo almacenan en su buche, una especie de bolsa ubicada en su aparato digestivo y durante este proceso, las enzimas en la saliva de las abejas comienzan a descomponer los azúcares complejos del néctar en azúcares simples, como la glucosa y la fructosa. Cuando el buche está lleno, las abejas regresan a la colmena para depositar el néctar recolectado.
Ya en la colmena, las abejas obreras transfieren el néctar a abejas obreras más jóvenes a través de un proceso de regeneración.
Las abejas que reciben el néctar regurgitado lo almacenan en las celdas de panal de la colmena y otras abejas obreras ventilan las celdas con sus alas para acelerar la evaporación del agua del néctar, convirtiéndolo en una sustancia más espesa.
Fotografía Archivo particular.
Una vez que el néctar se ha deshidratado lo suficiente y se ha convertido en miel, las abejas obreras sellan la celda del panal con una fina capa de cera de abeja para preservar la miel y protegerla de la humedad.
La miel almacenada en las celdas del panal servirá como alimento para la colonia de abejas, proporcionándoles energía y nutrientes durante los períodos en los que la recolección de néctar es escasa.
Este proceso es llevado a cabo por las abejas obreras, que constituyen la mayoría de la población de una colmena y son responsables de la recolección de néctar, la elaboración de la miel y la atención a las crías y la reina.
Fotografía Archivo particular.
La producción de miel es un proceso cooperativo y altamente organizado dentro de la colmena donde no se pierde detalle alguno, sino que por el contrario, cada quien asume el rol que le corresponde para trabajar de manera abnegada y silenciosa en un solo propósito.
En una colmena de abejas cada quien desempeña un papel específico que contribuye al funcionamiento general y la supervivencia de la colonia y del cometido en los roles y la forma cómo están constituidos en la producción de miel y en sus hábitos depende el resultado final.
La reina es el único reproductor de la colonia y su principal función es poner huevos, lo que garantiza la supervivencia y el crecimiento de la colonia, la reina no participa directamente en la producción de miel ni en la recolección de néctar.
Las abejas obreras son las hembras estériles más numerosas en la colmena y desempeñan una variedad de roles, porque son las responsables de recolectar néctar y polen de las flores para producir miel y alimentar a la colonia. Las abejas obreras cuidan y alimentan a las larvas y las pupas en la colmena, asegurando su desarrollo adecuado.
Algunas abejas obreras se encargan de ventilar la colmena para mantener una temperatura adecuada y eliminar la humedad y cuando la colmena está amenazada, las abejas obreras son las responsables de protegerla, utilizando sus aguijones para defenderla.
Los zánganos son machos cuya principal función es aparearse con la reina, ya que no participan en la recolección de néctar ni en la producción de miel, por lo que su vida es relativamente breve y, una vez que la reina ha sido fecundada, su presencia en la colmena es muy limitada.
Las abejas se comunican entre sí mediante una variedad de señales químicas y comportamentales, como el baile de la abeja que informa sobre la ubicación de fuentes de alimento. Las abejas tienen hábitos de trabajo muy definidos, con horarios regulares de actividad, especialmente durante las horas del día cuando las flores están más activas y la recolección de néctar es más eficiente.
Cúanto por aprender de estas organizaciones sistemáticas, respetuosas y abnegadas, donde como reza el dicho, “cada loro ocupa su estaca” a sabiendas de que todos son importantes como eslabones del proceso, tanto así que hasta el zángano es significativo a la hora de cumplir su rol y hacer su trabajo.
¿Cómo se extrae la miel del panal?
Necesitamos un ahumador, un extractor de miel, un cuchillo para cortar los panales, un cepillo suave y recipientes para almacenar la miel.
Antes de empezar se debe ahumar suavemente la colmena para calmar a las abejas y hacer que se retiren de los panales, con cuidado se retira los panales de la colmena manejándolos con cuidado para evitar dañar la estructura de la colmena y a las abejas.
Una vez se tienen los panales, se utiliza un cuchillo para cortar los opérculos de cera que sellan las celdas de la miel y eso permite que la miel fluya cuando los panales se coloquen en el extractor.
Se coloca los panales preparados en el extractor de miel, cuyo dispositivo utiliza la fuerza centrífuga para hacer que la miel salga de las celdas y se acumule en el fondo del extractor.
Cuando se haya extraído la miel, se procede a almacenarla en recipientes adecuados para su posterior consumo o venta, asegurándonos de etiquetar los recipientes con la fecha de extracción y otros detalles relevantes que se estipulan en las licencias de comercialización
o el masaje de chakras. Fotografía Archivo particular.
Después de extraer la miel se debe volver los panales vacíos a la colmena para que las abejas los limpien y puedan volver a llenarlos.
Es muy importante limpiar cuidadosamente todos los utensilios utilizados en el proceso para mantener la higiene y evitar la contaminación de la miel.
La Palestra enseña.
